PRECIOSA SANGRE
Nosotros nos cubrimos con hojas de higuera, pero las hojas de higuera no nos protegen como nos protege la sangre de Cristo, por eso, para estar protegidos después del pecado se tuvo que derramar sangre, para proteger y vestir a los primeros sobrevivientes: Adán y Eva.
Las ropas confeccionadas de hojas de higuera las usan para cubrir la vergüenza. La sangre de Cristo te limpia, te cubre, te da poder para vencer y autoridad para destrucción de fortalezas.
El mismo Dios les cubrió su desnudez, pero para eso se tuvieron que matar animalitos para tomar las telas o pieles, ¡Significa que la sangre tiene un gran poder! ¡Como hijos de Dios valemos su sangre preciosa! Adán se convirtió en sastre, pero ¡Dios es el mejor confeccionista en telas!
Si fuéramos conscientes de esto, ¡Seríamos vencedores en todo! ¡Haríamos huir a nuestro enemigo y a sus demonios, porque ellos no soportan la sangre!
¡No perdamos de vista el saber que hemos sido bañados con su preciosa sangre!
¡El que lea entienda!
“Ellos le han vencido por medio de la sangre del cordero….” Apocalipsis 12:11 NTV
“De hecho, según la ley de Moisés, casi todo se purificaba con sangre porque sin derramamiento de sangre no hay perdón”. Hebreos 9:22 NTV
¿Quieres estar vestido para que no te dañen los dardos del maligno? ¡Vístete de la sangre de Cristo! ¡Está disponible para ti!
Tiempo para meditar:
¿Te has vestido con la sangre de Cristo?
¿De qué manera crees que te ha protegido la sangre de Cristo?