Herencia Divina en Tiempos de Angustia
“Que el Señor te responda cuando estés angustiado; que el nombre del Dios de Jacob te proteja.” Salmo 20:1
Queridos hermanos, en los momentos de angustia, es fundamental recordar que no estamos solos. Dios nos ha dado su Palabra, un tesoro invaluable que nos ofrece consuelo y dirección. Hoy, quiero compartir con ustedes cómo la Palabra de Dios actúa como una herencia divina que nos acompaña en cada desafío:
- Protección en la angustia: La promesa de Dios es clara, Él responderá en nuestros momentos de necesidad. La oración en tiempos de angustia no solo es un clamor por ayuda, sino un recordatorio de que su protección nunca nos abandona.
- Cumplimiento de deseos: Dios conoce los deseos de nuestro corazón y tiene el poder de hacerlos realidad. La confianza en que Él puede y quiere bendecirnos es fundamental para vivir en su voluntad.
- Reconocimiento de nuestras ofrendas: Nuestras ofrendas y sacrificios no pasan desapercibidos ante Dios. Él valora nuestra obediencia y nuestro deseo de servirle y honrarle con lo que tenemos.
- Celebración de la victoria: La victoria que viene de Dios merece ser celebrada. Levantamos banderas en su nombre, no solo como un signo de nuestra fe, sino también como testimonio de su fidelidad en cumplir nuestras peticiones.
“Nosotros celebraremos tu victoria, y en el nombre de nuestro Dios desplegaremos las banderas. ¡Que el Señor cumpla todas tus peticiones!” Salmo 20:5 NVI
Tiempo para meditar:
- ¿Cómo puedo buscar la protección de Dios en los momentos de angustia?
- ¿He compartido con Dios los deseos profundos de mi corazón y confiado en que Él puede cumplirlos?
- ¿Cómo puedo mostrar mi gratitud a Dios por sus respuestas y bendiciones en mi vida?