LO QUE DIOS REQUIERE DE MÍ
Dios nos ha cuidado, nos ha amado, nos ha tenido paciencia, ha sido fiel, ha perdonado nuestros pecados, ha pasado por alto nuestra falta de integridad cuando le hemos prometido algo y no lo hemos cumplido, etc.
¡Esto lo ha hecho por mí! Me quito mis cargas, me amó con un amor inmerecido, me ha librado del mal, me ha puesto gente hermosa a mi alrededor que me bendicen, etc. ¡Qué más puedo decir! Soy un testimonio viviente de que Dios es amor verdadero, genuino y sincero.
Gracias Padre porque has sido fiel, seguiré poniendo mis ojos en ti, porque tú si salvas, sanas, liberas, rescatas, crees en la gente y prometes lo que cumples.
Algunas cosas que se requieren para tener cielos abiertos, para tener la bendición, el favor, la gracia y los cuidados de Dios para mí y para mis generaciones:
- Volvernos a Dios. Ayúdame a poner siempre mis ojos en ti y volverme a ti, a no poner mi mirada en lo que me rodea, sino en ti Señor.
- Practicar el amor. No estar enfocada todo el tiempo en mí, sino, ayudando a otros.
- Practicar la justicia. Que, así como a mí me gusta que se me haga justicia, que yo pueda ser justa con los demás.
- Confiar siempre en Dios. Poner toda mi confianza en ti porque tú no fallas.
Tiempo para meditar:
¿Qué ha hecho Dios por ti?
¿De qué manera has experimentado su amor?
¿Qué necesitas hacer para contar con su bendición y cuidados?